miércoles, 28 de diciembre de 2011

The Artist


Ayer fuí al cine a ver "The Artist". Tenía enormes ganas de verla,en parte por las excelentes opiniones que había leído de la película en dos de mis compañeras de Zinéfilas: Bargalloneta http://bargalloneta.blogspot.com/2011/12/artist.html y Manderly http://manderly07.blogspot.com/2011/12/blog-post.html 
  y también algún blog cinéfilo amigo como Scotty  http://elblogdescotty.blogspot.com/2011/12/artist.html ) u otro que no por recientemente incorporado,considero menos como es el caso de David Amorós (http://losthighwayblog.blogspot.com/2011/12/mi-pelicula-de-la-semana-artist.html ).

En relación a mis compañeras de Zinéfilas,Bargalloneta con su entusiasmo habitual,me contagió rápidamente el interés,me generó expectación y curiosidad con su pasión cinéfila de alcance insospechado.Manderly,con su delicada entrada, le rindió un homenaje a "The artist" en tono clásico,elegante,yo diría que incluso "mudo" y en blanco y negro,muy años 20.
En resumen,ambas influyeron en que fuera al cine con vivas ganas y máxima expectación.Y afortunadamente, hoy a nadie puedo reprochar nada ;)



The artist es una película que te transporta en el tiempo.Es un túnel por el que se cuela el espectador que no sabe muy bien si está en el 2011 o en los años 20 ante una película de cine mudo y en blanco y negro.
El director francés Michel Hazanavicius, nos deja una película-homenaje al cine clásico,al cine mudo en los albores del cine sonoro y eso es algo a lo que cualquiera que adolezca de amor al cine, sencillamente no puede resistirse.


A nivel argumental,la historia no es nueva.Ya en "Ha nacido una estrella" de Barbra Streisand y Chris Christopherson,veíamos el mismo planteamiento pero en el ámbito de la música.

Aquí en el Hollywood de los de 1927, una estrella del cine mudo George Valentin ( un grandioso Jean Dujardin) saborea las mieles del éxito y la popularidad hasta que irrumpe con fuerza el cine sonoro.
Al tiempo que somos testigos del declive de George Valentin,presenciamos el imparable ascenso de una actriz, Peppy Miller (maravillosa Bérénice Bejo) que de ser extra y con suerte secundaria en el cine mudo,ve catapultada su carrera con el nacimiento del cine sonoro hasta convertirse en una estrella que todos los estudios de cine se disputan.


Tal cual en "Ha nacido una estrella", ambos: astro en declive-estrella en ascenso,se enamoran perdidamente, pero aquí el orgullo de George Valentin y su resistencia a subirse al carro del cambio y la revolución que supone el sonido en el cine, serán un obstáculo  no se sabe si salvable en el tiempo.


Pero ¿por qué es preciso ver esta película si en realidad el argumento ya lo hemos visto antes en el cine en más de una ocasión? tal vez porque es todo un prodigio que una película producida en el 2011 sea capaz de transportarnos a los años 20 y lleguemos a dudar de si estamos ante una película de cine clásico,o porque los actores están en estado de gracia y únicamente valiéndose de los gestos,les sobren las palabras o tal vez porque las secuencias a menudo son un despliegue de guiños y homenajes al cine de otras épocas: "Bailando bajo la lluvia" y tantas tantas películas de Fred Astaire y Ginger Rogers ,la enorme "El crepúsculo de los Dioses" (esa Gloria Swanson....con el proyector,la decadencia de una estrella)....etc.... el cine clásico está presente en muchos fotogramas,y "The artist" se convierte en un sentido y entregado homenaje a la meca del cine clásico,así que imagino la lluvia de estatuillas que le esperan en la próxima ceremonia de los Oscars......


No quisiera olvidarme de los actores secundarios porque son otro punto fuerte de la película como por ejemplo John Goodman (el director Al Zimmer) aunque yo siempre le recordaré por su papel en el Gran Lebowsky y otro gran secundario James Cromwell (el leal chófer Clifton) al que yo siempre recordaré por su aparición en la serie "Six feet under".


Y tampoco quisiera pasar por alto el papel fundamental de la música  compuesta por el francés Ludovic Buorce en "The artist" porque esa magia que se crea desde el primer minuto de metraje sería inconcebible sin los acordes que consiguen timbrar la emoción del espectador,sin necesidad de recurrir a las palabras.




Si tuviera que rescatar alguna secuencia,me quedo con un buen ramillete pero especialmente con la que aparece Peppy Miller acariciando la chaqueta de George Valentino o con la secuencia del hospital,cuando ella descubre la cinta que él ha rescatado con grave peligro de perder su vida.Por supuesto,me quedo con todas las secuencias en las que aparece el perrillo que acompaña siempre a George Valentino (incluso en el cine!!) y con la escena de su segundo encuentro,con ese duelo de claqué que se marcan siendo únicamente las piernas las protagonistas,porque no pueden verse las caras.

 En resumen,una película que hay que ver porque sobran los motivos...... o aunque sólo fuera por salir del cine improvisando unos pasos de claqué.

Ahhhh!!! casi lo olvido,pregunta para l@s observador@s que además de cinéfil@s sean como es mi caso, aficcionad@s a la pintura: ¿qué dos cuadros aparecen en la película de una artista rusa que en los años 20 fue sin duda una mujer adelantada a su tiempo ??.............