viernes, 10 de junio de 2011

Cosas que perdimos en el fuego








Sigo indagando en la filmografía de Susanne Bier ("En un mundo mejor","Después de la boda"...etc).
Me interesa especialmente la manera de encarar el drama,género que en el cine por otro lado,me doy cuenta que termina siendo mi debilidad.

Esta película "Cosas que perdimos en el fuego" es de 2007,veo fue su primera incursión en Hollywood,no olvidemos que ella es danesa,y las críticas fueron bastante favorables en general.


Se basó en un guión ajeno para rodar una historia donde una mujer afroamericana,Audrey Burke (extraordinaria Halle Berry) pierde trágicamente a su marido y crea un vínculo con el que fue el mejor amigo de su marido,Jerry Sunborne (imponente Benicio del Toro) quien sufre su propio via crucis para superar su adicción a las drogas,con la esperanza quizá de que le ayude a sobrellevar la pérdida de su marido especialmente de cara a sus dos hijos.




A partir de aquí,podría deciros que ha sido la interpretación en la que más me ha gustado Benicio del Toro (que también me gustó mucho en "21 gramos"),sus ojos,su afán de evadirse de sí mismo,el síndrome de abstinencia,su respetuosa actitud hacia la familia de su amigo.....es un ejercicio difícil de olvidar.


Él,junto a Halle Berry,son la principal baza de la película,porque ella pasa del odio y la aversión hacia el amigo de infancia de su marido,a la necesidad de aferrarse emocionalmente a alguien que también le quiso y le admiró ,a fin de hacer quizá más liviano el dolor.





Los giros inexplicables de la vida,hacen que de la noche a la mañana ese atormentado Jerry se convierta en una pieza angular en el núcleo familiar.Los niños le cogen mucho cariño,a pesar de su aparente amargura,él está, simplemente está presente,y con su presencia les apoya,a veces no hace falta nada más.

Me quedo especialmente con una frase que le dice Audrey a Jerry cuando le ofrece un lugar anexo a la casa donde vivir temporalmente: "Acepta lo bueno,Jerry,acepta lo bueno".Es paradójico que  a veces lo que más nos cueste aceptar,sobre todo después de haber sufrido mucho,es que algo bueno esté pasando y sea real.