martes, 18 de enero de 2011

Somewhere(en algún lugar)



Termino de ver la última película de Sofia Coppola: "Somewhere"(2010), interpretada por Stephen Dorff y Elle Fanning.



Vuelvo a caer de nuevo rendida a los pies de una gran directora que ya me conmovió en "Lost in Translation" (http://historias-troyanas.blogia.com/2004/090601-lost-in-translation.php),no porque estemos ante una película enrevesada con un gran despliegue de estrellas y con un guión efervescente.




No,porque "Somewhere"plantea un argumento sencillo que dice más por lo que calla que por lo que cuenta,partiendo de la historia de un actor que está en la cima de su carrera en Hollywood, lo tiene todo:un Ferrary,mujeres,lujosas suites con piscinas privadas.....y sin embargo no es feliz.
Marco,ese hombre que podría ser la envidia de cualquier hombre,se siente solo y vacío y se da cuenta de que el único lazo real que le mantiene conectado a una vida con sentido,es su hija de 11 años,que supuestamente vive con su madre y con la que Marco siente no ha tenido una presencia lo suficientemente activa ni significativa.



"Somewhere" me parece el reflejo de un hombre que carece de lo más importante: la sensación de sentirse amado y de algún modo,necesario,y cuando su hija,que debido a que la madre se va de viaje,ha de pasar más tiempo con él,se da cuenta de que su vida ha perdido por completo el rumbo y realmente no hace otra cosa que dar tumbos de promoción en promoción,festivales,fiestas y eventos ruidosos y ajenos.



Su hija le hace sentir parte de su vida,los momentos de complicidad en la piscina o cuando él está tocando el piano y ella se ha quedado dormida,son de una belleza inusual.La escena debajo del agua es una de las escenas más bonitas que he visto en el cine,así,con esa rotundidad y ya me temo se queda grabada en mi retina para siempre.Esa delicadeza al rodar,ese detenerse en la belleza de una imagen y recrearse en los silencios al tiempo que se musicalizan algunas escenas hermosa y armoniosamente,es propio del cine de Sofia Coppola,tal cual lo hizo en Lost in translation.




Ese actor Marco triunfador y perdedor,aclamado por las multitudes y sin embargo,solo,me ha recordado al Bill Murray de Lost in Translation profundamente infeliz,perdido y aislado.Es la suya una mirada llena de melancolía al borde de la desesperanza que sólo se ilumina cuando su hija irrumpe con fuerza en su vida para rescatarlo del paradójico éxito.
Es ése un rescate en toda regla que sólo podría culminar con un final tan poético como esperanzador.