domingo, 30 de septiembre de 2012

Headhunters




Ayer vi "Headhunters" en versión original y subtitulada. La película es de Morten Tyldum y está basada en la novela de Jo Nesbø.
Llegaba a mí previa y ampliamente respaldada por la opinión de cinéfil@s que sigo y de los que me fío,como de nuestra compañera Lu de Zinéfilas http://zinefilaz.blogspot.com.es/2012/09/headhunters.html, de Daniel de Cine Puro http://daniel-cinepuro.blogspot.com.es/2012/09/critica-de-headhunters.html y de Scotty del Blog de Scotty http://elblogdescotty.blogspot.com.es/2012/09/headhunters.html.


El cine nórdico,concretamente noruego,una vez más nos sorprende para bien.
El protagonista de esta historia no alcanza el metro setenta de estatura,dirige una empresa de cazatalentos en su vida pública y en su vida privada es ladrón de guante blanco de obras de arte.


No tiene más remedio si quiere mantener el nivel de vida al que ha acostumbrado a su espectacular esposa,la cual acaba de abrir una galería de arte Ella es ajena a cómo ha conseguido su esposo la fortuna de la que dispone y la moderna casa de diseño ajardinada en la que viven.



Nuestro protagonista se topa con otro colega extranjero que curiosamente tiene debido a una supuesta herencia, un Rubens original en su casa.Nuestro protagonista cree que éste será el golpe perfecto para pensar en un futuro con su esposa .e incluso plantearse la posibilidad de tener un hijo, que es lo que su esposa desea de forma imperiosa,pero nada ocurrirá de la forma esperada.

El colega de nuestro protagonista,es un joven atractivo,alto (rasgo al que nuestro protagonista da una considerable importancia) y muy ambicioso.





Desde el momento en que el golpe que pensaba perfecto,fracasa, una serie de acontecimientos trepidantes le irán sucediendo en su camino.Es posible que hubiera infravalorado a su rival,que en este caso,parece haber agradado a su esposa,y lo que un principio parecía un plan limpio y redondo,termina convirtiéndose en una auténtica pesadilla.



Muchas de las claves no son reveladas hasta el final.Vamos asistiendo a sucesivas muertes,accidentes y nuestro ladrón se convierte es perseguido,en víctima acosada,en presa de un truculento complot donde su vida corre peligro y la realidad da un vuelco de 360 grados, en la que su amante parece cómplice de su súbito enemigo y su esposa  puede que traidora.

El protagonista cae en picado en una espiral de desgracia,de huida,de repetidos intentos de asesinato.
El que en principio era el personaje que apuntaba ser "el malo" de la película se convierte en víctima de otro verdugo letal,disciplinado,con un pasado militar que da pavor debido a su excelente entrenamiento en el arte de buscar,encontrar y exterminar.

Me ha gustado todo,las dosis de violencia justificadas,la intriga,la interpretación....el hecho de que no sepamos hasta el final de quien podemos o no confiar.
He leído en el blog de Scotty que el film tiene influencias de Hichtcock y de Polansky, ambas me cuadran,el primero por el manejo del suspense el segundo por lo enrevesado de la trama y el lado más oscuro de la condición humana.

 
Me quedo con varias escenas,pero en especial,destaco la del momento en que el protagonista milagrosamente sobrevive a un aparatoso intento de asesinato en carretera y de rodillas,ensangrentado,se afeita la cabeza y cae desplomado entre sollozos.Genial.

Sé que muchos califican la película de inverosímil y desproporcionada,para mí, ha sido un subidón impresionante como diría Lu de adrenalina y añado pura y dura,con emoción,intriga,acción,violencia,suspense....vamos que me ha encantado.

Y por cierto,no cambio ni un ápice el final,convencional o no,no se me ocurre un cierre mejor.



lunes, 24 de septiembre de 2012

A Roma con amor



De Bergman a Woody Allen.Para qué negarlo,sintonizo más con el segundo que con el primero.

"A Roma con amor" (2012) es posible no sea su mejor película ,pero estoy de acuerdo con Jordicine en que es una película divertida y eso es más de lo que puede decirse de muchas otras películas en cartelera.
Aviso que entraré en materia,sin alguien no quiere detalles,éste es el mejor momento para posponer la lectura de esta reseña.

En este desfile de historias que no se cruzan en la ciudad eterna,me quedo entre todas,con la que el triángulo amoroso formado entre otros por Ellen Page ,Jesse Eisenberg y Greta Gerwig.



Jesse Eisenberg es Jack, un joven estudiante de arquitectura que vive con su novia, Sally (Greta Gerwig) ,la cual invita a Roma a una amiga Mónica,interpretada por Ellen Page, que está pasando un mal momento tras una ruptura amorosa.
 
La atracción que sienten entre ellos Jack y Mónica es casi instantánea,pero ahí está el personaje interpretado por Alec Baldwin,John,como el veterano  arquitecto que ya vivió todas esas experiencias en un pasado, para aleccionar a Jack acerca de cómo manejarse con las mujeres.Es como su alter y está presente en cada encuentro con Mónica,advirtiéndole del peligro inminente que esta mujer representa en su vida.
 

Mónica  es el prototipo de la conquistadora nata,sabe cómo manejar los hilos para llevarse "el gato al agua" y por mucho que Jack sepa que esta joven snob con aires de intelectual y bisexual no es la opción más consistente y posiblemente sea la menos adecuada ,todo apunta a que caerá en las redes de su invitada,que además,es una de las mejores amigas de Sally.
Allen parece decirnos entre líneas que a veces lo de "es demasiado bonito para ser verdad" sucede que es cierto,sin más,aunque claro,las advertencias no sirven de nada cuando nos vemos atrapados por una intensa emoción.


Otra historia paralela es la de la joven turista Hayley (Alison Pill) que conoce a un apuesto italiano llamado Michelangelo (Flavio Parenti) estando de vacaciones y ambos se enamoran perdidamente y deciden conocer a sus respectivas familias.
Ahí entra en acción Woody Allen interpretando al padre de la novia,Jerry siendo un ex-representante de espectáculos musicales algo excéntrico y materialista que se queda prendado de la voz de su futuro consuegro(el tenor Fabio Armiliata),el padre del novio.



Los encuentros-encontronazos entre los consuegros son de lo mejor de la película.Allen entra en choque primero con el novio de su hija,que es sindicalista e idealista y después con la familia del novio cuando pretende lanzar a la fama la faceta de tenor del padre del novio: qué curioso porque esa capacidad solo parece funcionar "en la ducha".




Por otro lado,tenemos la historia de los recién casados:Antonio y Milli, que vienen del sur de Italia, interpretados por Alessandro Tiberi y Alessandra Mastronardi.Su imagen es de apocados provincianos,y sin embargo,se verán envueltos en auténticos líos de faldas y pantalones al más puro estilo de comedia clásica americana:malentendidos,confusiones....situaciones disparatadas que despiertan más de una sonrisa y por las que también entra en acción nuestra Penélope Cruz,en el papel de un prostituta que tiene como clientela habitual a la crême de la crême del mundo empresarial romano.



La crítica hacia la fama y por qué no,ya de paso a la televisión sensacionalista de Berluscconi,donde la mujer es a menudo "objeto sexual",también sale a la palestra a través de la historia de Leopoldo Pisanello ,el personaje que interpreta Roberto Benigni, un tipo corriente que de la noche a la mañana se ve asaltado por la popularidad.

La fama a través del humor absurdo y surrealista se muestra caprichosa,voluble, capaz de ensalzar y de derrumbar a cualquiera.La fama inmerecida,destructiva,que te abre las puertas tan fácil como te las cierra.

Puede que pieza menor en la filmografía de Allen,pero no deja de hacernos reír por ejemplo cuando le vemos interpretarse a sí mismo y en batalla dialéctica con su esposa, Phyllis (Judy Davis)que curiosamente,es psiquiatra y se burla de sus neuras con fina ironía.
Las cuatro historias ni se tocan y sin embargo,tienen en común,el mismo escenario:la ciudad de Roma,con su luz,sus calles,sus monumentos,sus fuentes,sus ventanales....preciosa fotografía.

Como dice Manderly
"La incuestionable protagonista es la eterna ciudad de Roma, que tras la cámara de Woody Allen se ve y se respira tan maravillosa como lo es en la realidad. Tanto es así que se sienten muchas ganas de volver a callejear por sus calles."
Para quienes ya hemos visitado la ciudad,dan ganas de volver,para quienes no hayan ido nunca,tendrán un irrefrenable deseo de ir y callejear.

La película es desigual,la han tachado de larga,pero si te gusta Woody Allen,sin ser una gran obra,no solo se deja ver,si no que a veces,te hace reír.
No quiero dejar pasar por alto,el cameo de la actriz italiana Ornella Muti,una aparición a destacar.

Me pregunto si hay cierto escepticismo en el mensaje que nos transmite Allen  esta vez ,sobre todo,en la primera de las historias,si en el eterno duelo entre razón-emoción,hay que ser prudentes y no dejarse llevar por las novedades,me pregunto si es un ajuste personal de cuentas con su pasado y tampoco he  puedo evitar acordarme de aquello de :
"no dejes al amigo(amor)viejo por el nuevo,porque al nuevo,todavía no le conoces"
¿sirven de algo en estos casos las advertencias? mucho me temo que no.....que además,paradójicamente la mejor manera de liberarnos,a veces es equivocarse y caer.




viernes, 21 de septiembre de 2012

2º Aniversario de Zinéfilas






Con este fantástico diseño de portada elaborado por Manderly,estamos de aniversario en Zinéfilas,así que hemos elaborado entre todas(! ya somos ocho!!!) una entrada especial donde cada una destaca la película que ha visto y que más le ha gustado en lo que va de año.


Me llama la atención,como señalaba Manderly,que no hemos escogido ni una sola película estadounidense y entre las ocho destacadas, sí dos películas españolas.
 Si queréis conocer de primera mano nuestras elecciones pasaos por aquí
que estáis tod@s invitad@s a la celebración.





domingo, 16 de septiembre de 2012

Secretos de un matrimonio


Tras una larga e inusual pausa vacacional, vuelvo a historias-troyanas,con las pilas bien cargadas y un título que a mi juicio,bien merece un entusiasta regreso.

Me refiero a "Secretos de un matrimonio" una película que el maestro sueco Ingmar Bergman dirigió en 1973 interpretada por Liv Ullmann y Erland Josephson.

La película es ni más ni menos que el recorrido que hace un matrimonio formado por Johan, profesor de psicología, y Marianne, que es  abogada, durante prácticamente toda una vida.

Aviso que es fácil ahonde en la trama,que por otro lado carece de toda acción y se centra en exclusiva en la relación,pero si alguien que no ha visto la película,prefiere no tener detalles,éste es el momento de desistir en la lectura y retomar la reseña en otra ocasión.

Ambos,Marianne y Johan, empiezan a ser conscientes de las fisuras que esconde su aparente matrimonio feliz a raíz de la crisis que están viviendo sus amigos Peter y Katerina.

La película dura 168 minutos y no tiene música.El diálogo,es lo esencial.

Asistimos a la maestría de un director que con precisión de cirujano abre los abismos que se esconden en casi todas las relaciones de pareja y que tantas otras veces a posteriori ha inspirado a otros cineastas como Woody Allen influenciado y también obsesionado por descubrir los entresijos de las parejas.

Tal cual una novela se tratara,la película está dividida en capítulos.Asistimos por tanto a todas las fases que recorre el matrimonio: la época de plenitud,la de sacar a la luz los puntos débiles,la de crisis,la de abandono,la de indecisos y sucesivos regresos y recaídas......toda una vida de vaivenes a pesar de los cuales,tanto Johan como Marianne han estado presentes el uno en la vida del otro,más o menos distantes,más o menos implicados.



Es sorprendente cómo somos testigos de los roles que en distintos momentos juegan Johan y Marianne y también de su alternancia.Si en los comienzos del naufragio de la relación,es Marianne la parte más débil y vulnerable y presenciamos cómo Johan se muestra proclive al abandono tras haberse enamorado de otra mujer,con el paso de los años,las posturas se invierten y es la vida la que devuelve el rol de desvalido a Johan y el de independencia y determinación a Marianne.


No hay un punto de encuentro intermedio en ningún momento.Es como si se cumpliera esa famosa profecía que pone de manifiesto que siempre hay uno que da más,siempre hay uno que ama y otro que de alguna manera,en el fondo,se deja amar.Amante y amado en constante alternancia a lo largo de décadas en este caso ¿nos está queriendo decir el director que la balanza siempre está descompensada?

Otra de las ideas que planea en la película,es que llega un punto en la relación,que se produce cierta conformidad y que ese estado de "resignación" es incluso preferible al abandono.
Es la misma idea que se menciona en la película "2 días en París " de July Delpy.


No tengo ninguna certeza pero me inclino a pensar que es una verdad a medias, pues en el caso de Johan por ejemplo,sí llega un punto en que la emoción por una nueva relación es más intensa que la inercia de esa misma conformidad.
Si lo vemos con perspectiva,alguien podría rebatir que ese abandono es temporal.Sí,pero en cualquier caso,son las emociones,no nosotros,quienes una vez más, aunque sea de manera siempre puntual,tienen la última voz.
Visto lo visto,no puedo creer en esa conformidad,no al menos a lo largo de toda una vida, pues ante una relación agotada aquí y ahora existen muchas posibilidades de que nos asalte ahí fuera una nueva fuerza motora que nos convenza del todo de la necesidad de pasar página,o directamente cambiar de libro,expresión que tomo prestada y que he leído por ahí;)


No quiero dejar pasar por alto recomendar una fantástica entrada de Antígona del blog "La Cólera de Aquiles",ella que también es muy cirujana a la hora de diseccionar temas de la índole más diversa, hizo una excelente reseña sobre la película aquí


Por otro lado,me llama la atención que para encontrar la armonía como pareja entre Johan y Marianne,sean precisas varias condiciones desde luego,poco o nada convencionales:

-la primera,cierta distancia
-la segunda,respectivas parejas estables.

Me refiero que en el único momento en que percibo a Marianne y a Johan en cierto equilibrio como amantes es cuando, pasados ya muchos años tras su divorcio,se encuentran y las exigencias del uno hacia el otro,se han diluido y las presiones y las expectativas y es entonces,cuando se ven es posible como verdaderamente son. Ya no han de demostrar nada el uno al otro,han encontrado la paz,tienen una vida independiente,más o menos plena al lado de otras personas,y llegan libres y desprovistos de reproches a un reencuentro que precisan y que de alguna forma les completa como personas.

Da la sensación de que sus vidas se han ido confeccionando conjuntamente y ya no pueden prescindir el uno del otro,aunque sea de forma espaciada y casi a base de encuentros clandestinos.
Qué complicados somos los humanos,qué impredecibles,qué nexos llegamos a establecer en algunas relaciones en las que no podemos estar ni excesivamente cerca,ni tampoco lejos del todo y para siempre.