jueves, 7 de abril de 2011
Entrelobos
Me detengo hoy ante una película española a mi modo de ver,digna de toda atención "Entrelobos", una película de Gerardo Olivares que se estrenó en Noviembre del 2010.
Entrelobos cuenta la historia(basada en un caso real) de Marcos, un niño de 7 años (interpretado por Manuel Angel Camacho)que en la España de los años 50 fue dejado por su familia a cargo de un terrateniente cuyo lacayo lo deja a cargo de un pastor de la zona ,Atanasio (Sancho Gracia) que le enseñará todo lo que sabe a fin de poder sobrevivir en la sierra.
Sorprendente es en esta película la visión que se realiza de la naturaleza en estado puro,toda la fauna y flora de la sierra andaluza,en todo su esplendor,sale al encuentro del espectad@r con una belleza deslumbrante,acompañada de una hermosa banda sonora.
El drama de este niño-salvaje,se produce al morir Atasio y quedarse solo a merced de las habilidades aprendidas,teniendo como única compañía,los buhos,las águilas,el hurón del que se vale para atrapar a los conejos y como no, los lobos,quienes se convierten en sus hermanos.
La libertad intacta,la soledad,el poderoso vínculo que se establece con los animales del entorno,el más estrecho con los salvajes lobos,resulta asombrosamente veraz,hasta el punto que las apariciones puntuales de otros hombres y por tanto de la "civilización" es lo que suena a mentira amenazadora.
La película es una historia que podría recordarnos a algún wenster con villano incluido,el interpretado por Carlos Bardem,el bandolero que persigue a un huído de la ley,un maqui ( interpretado por Àlex Brendemühl) ,que resulta ser el hijo del pastor Atasio,pero también un drama de corte íntimamente humano como el de "Hacia rutas salvajes".
El niño crecerá entre lobos,como uno más y se convertirá en un joven (interpretado por Juan José Ballesta),completamente integrado en la naturaleza,más lobo que humano,un miembro más de la manada durante al menos 12 años.
Volver a la sociedad es en ese momento le supone alejarse de todo lo que su vida ha supuesto mayor verdad.